Una dieta rica en frutas y verduras, nueces y granos integrales y baja en sal, bebidas azucaradas y carnes rojas y procesadas, se asocia con un menor riesgo de gota.
Pero una dieta típica ‘occidental’ se asocia con un mayor riesgo de gota, según un estudio publicado por The BMJ.
La gota es una enfermedad de las articulaciones que causa dolor extremo e hinchazón.
Es más común en hombres de 40 años o más y es causada por un exceso de ácido úrico en la sangre (conocido como hiperuricemia) que conduce a la acumulación de cristales de ácido úrico alrededor de las articulaciones.
La dieta de Enfoques dietéticos para detener la hipertensión (DASH) reduce la presión arterial y se recomienda para prevenir la enfermedad cardíaca. También se ha encontrado que reduce los niveles de ácido úrico en la sangre.
Por lo tanto, la dieta DASH puede reducir el riesgo de gota.
Para investigar esto más a fondo, un equipo de investigadores de EE. UU. Y Canadá examinó la relación entre DASH y los patrones dietéticos occidentales y el riesgo de gota.
Analizaron los datos de más de 44,000 hombres de 40 a 75 años sin antecedentes de gota que completaron cuestionarios detallados sobre alimentos que se actualizaron cada cuatro años.
A cada participante se le asignó un puntaje DASH (que refleja una alta ingesta de frutas, verduras, nueces y legumbres, como guisantes, frijoles y lentejas, productos lácteos bajos en grasa y granos integrales, y baja ingesta de sal, bebidas endulzadas y rojo y procesado carnes) y un puntaje occidental (que refleja una mayor ingesta de carnes rojas y procesadas, papas fritas, granos refinados, dulces y postres).
Durante los 26 años de seguimiento, un puntaje DASH más alto se asoció con un menor riesgo de gota, mientras que un patrón occidental más alto se asoció con un mayor riesgo de gota.
Estas asociaciones fueron independientes de los factores de riesgo conocidos para la gota, como la edad, el índice de masa corporal, la presión arterial alta y la ingesta de alcohol y café.
Los autores señalan que este es un estudio observacional, por lo que no se pueden extraer conclusiones firmes sobre causa y efecto, y describen algunas limitaciones que podrían haber introducido un sesgo.
Sin embargo, dicen que la dieta DASH “puede proporcionar un enfoque dietético preventivo atractivo para el riesgo de gota”, ya que también trata la presión arterial alta, que afecta a la gran mayoría de los pacientes con gota.
Por lo tanto, la dieta DASH tiene el potencial de “matar dos pájaros de un tiro”.
Estos datos también brindan apoyo para los estudios de intervención para examinar los efectos de la dieta DASH en el nivel de ácido úrico en sangre entre los pacientes con gota, así como para el riesgo de brotes de gota, agregaron.