Aunque la trayectoria musical de Homero Ontiveros se forja con 25 años de experiencia al ser pieza clave en Inspector, como tecladista y compositor del grupo. en 2018, le llegó la hora de tomar un camino alterno para lanzar un primer disco en solitario titulado “Nada que perdonar”. El título se lo tomó prestado el título a su amigo, el escritor J. M. Servín; el contenido en cambio, bebe de otras aguas.
En 2020 explotó su creatividad como músico y empezó a componer desde el aislamiento, para hacer una reflexión y reflejo de cómo las emociones se han tenido que adaptar a una nueva dinámica, compañías, soledades, miedos, motivaciones y crisis desde distintas perspectivas.
De esta manera, el cantautor reconoce que crear música desde su casa ha sido un nuevo reto partiendo desde el confinamiento, lo que también le ha permitido tener un acercamiento más personal con sus seguidores y nuevo público que se suma a su proyecto.
Ahora, nos presenta su más reciente sencillo el cual habla sobre el encuentro en un baile llamado “Boogaloo Calavera”
