En una era de música basada en ritmos hecha por computadora, la banda con sede en Los Ángeles es la antítesis de la música pop moderna. Centrándose en sonidos y arreglos clásicos y aprovechando la inspiración de la maestría musical de los años 70 y la composición de canciones atemporales.
“Heart of Gold” es el primer sencillo de su próximo álbum “Forevermore”, lanzado a finales de este año. La banda combina la arrogancia del rock and roll, la sutil calidez del country y el clásico optimismo pop sin disculpas. Los compositores Joe Guese y Casey Shea convirtieron el garaje de Shea en un estudio improvisado y aprendieron a grabar, diseñar, producir y mezclar para no retrasar la creación y el lanzamiento de su nueva música debido a la pandemia.
“Había hecho algunas grabaciones por mi cuenta, pero nunca había intentado mezclar correctamente un álbum de banda… mezclar una batería completa, todo ese tipo de cosas”, explica Shea. “Pasé el último año y medio enseñándome a mí mismo cómo “mezclar” y grabar entre comillas. He hecho suficientes álbumes y he estado en suficientes salas para saber en general cómo producir lo que escucho en mi cabeza, siempre y cuando tenga a alguien que sea lo suficientemente bueno como guitarrista para tocarlo. Afortunadamente, Joe lo es”.
“Heart Of Gold” tomó forma bastante mística después de que se intentó un borrador inicial de la canción. Casey dice: “Habíamos establecido un montón de acústica, y busqué un pase en una voz áspera, para que pudiéramos tener algo para escuchar durante la noche. Durante esa toma, entre los versos 4 y 5 (y sin duda porque la canción se arrastraba y no iba a ninguna parte) grité “Oh Mary, Oh Mary”. Y hizo clic. La idea de traerlo de vuelta a la fuente de toda literatura: que estaba vagando por la vida perdido en el desierto, y en el momento en que se había ido toda esperanza, me encuentro con esta figura de reina que me salva… en un bar de todos. lugares…”